La evolución cultural de Sinterklaas en Holanda
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Eztizen Sánchez MontesEl Papá Noel holandés y su acompañante Pedrito el Negro han sufrido y sobrevivido a constantes acusaciones de racismo e insensitividad cultural. Sin embargo, esta celebración del 5 de diciembre se está ganando el cariño de las nuevas generaciones de inmigrantes y facilitándoles la integración en la sociedad neerlandesa.
Sinterklaas, el personaje navideño neerlandés, con sus característicos pelo y barba blanca, sirvieron de modelo para el Santa Claus estadounidense. La versión holandesa es más cercana al San Nicolás original, ya que Sinterklaas lleva una gran cruz en la mano, una capa roja y el mitra episcopal. Desde que abandonase su Turquía natal vive no en el Polo Norte, sino en Madrid. Todos los años zarpa desde la capital española (que curiosamente, no tiene salida al mar) en un gran barco de vapor y llega a los Países Bajos para dejar regalos en los zapatos de los niños que se hayan portado bien. En este viaje le acompaña un grupo de traviesos "ayudantes", llamados Zwarte Piet (Pedrito el Negro).
¿Un ataque a la identidad nacional?
Varias semanas antes de intercambiar regalos y poesía el 5 de diciembre, las ciudades neerlandesas organizan enormes desfiles para dar la bienvenida a Sinterklaas. Este llega encima de su caballo blanco Amerigo, llamado así en honor del explorador italiano Amerigo Vespucci, y le recibe una marea de niños y padres maravillados. Un grupo de Pedritos Negros, representados por actores blancos con pelucas afro y la cara pintada de negro, reparten caramelos entre el público. Este representación de Pedrito el Negro ha creado un intenso debate, así que para calmar el ambiente, en lugar de contar la leyenda de que es un morisco con los rasgos exagerados o un esclavo africano liberado por Sinterklaas, ahora se relata la historia más suave de que es un joven con la cara manchada de hollín.
Artículo sobre los ayudantes de de Santa Claus en cafebabel.es
Los neerlandeses tienen fama de ponerse a la defensiva cuando se les pregunta por el origen racista de la representación de Pedrito el Negro. Según el etnologo John Helsloot, del Instituto Meertens de Ámsterdam, "criticar a Zwarte Piet se considera un ataque a la indentidad nacional neerlandesa". Pone como ejemplo a Rita Verdonk, política de derechas y ex ministra de integración e inmigración, que en 2007 lanzó una efímera campaña política llamada "Orgullosos de Holanda" (Trots op Nederland). Verdonk, que considera la cultura neerlandesa en peligro de extinción y se autoproclama como su defensora, pronunció un discurso en el que aseguraba que "ellos" querían abolir Sinterklaas. Aunque nunca se aclaró quiénes eran "ellos", se puede deducir que se refería a los extranjeros, especialmente a los negros, musulmanes e inmigrantes.
¿Qué piensan los niños?
Como en muchos países de la UE, los Países Bajos han sufrido un cambio demográfico recientemente por la prolongada inmigración desde países como Turquía o Marruecos. Para medir el atractivo de Sinterklaas entre estos nuevos ciudadanos, varios estudiantes de secundaria holandeses con uno o dos padres inmigrantes respondieron a varias preguntas. De 15 entrevistados que vivían en las afueras de Ámsterdam y La Haya, 10 crecieron en un hogar musulmán, uno en un hogar hindú y 4 en hogares sin creencias religiosas. Pero independientemente de su religión, todos ellos admitieron que creían en Sinterklaas de niños y todos lo celebraban en la escuela. Más de la mitad de los adolescentes musulmanes dijeron celebrar Sinterklaas en casa con sus familias, aunque el islam prohíbe la celebración de fiestas no musulmanas. Aunque Sinterklaas tiene raíces católicas, todos los estudiantes excepto uno la consideraban una celebración cultural y no religiosa. "La gente de cualquier religión puede participar en la tradición de Sinterklaas", respondió uno de los jóvenes, hijo de un inmigrante turco.
Aunque muchos adultos perciben que Sinterklaas está desapareciendo debido a la comercialización, la sensación global es de que esta fiesta no es religiosa, por lo que se perpetúa como una celebración común de la identidad neerlandesa. "Yo no lo celebraba en casa", dijo un adolescente, musulmán practicante, "pero tampoco me plantée que lo hiciésemos porque sientes la celebración por todas partes". Una encuesta reciente del mismo grupo de investigadores vio que, debido a la crisis económica europea, solo la mitad de los neerlandeses planeaban celebrar Sinterklaas en 2012. Este descenso aumenta con las expectativas de recibir más regalos aún en Navidad, y la controversia de Pedrito el Negro no hace más que acrecentar el olvido de Sinterklaas. Sin embargo, es interesante ver que la defensa acérrima de Pedrito el Negro está suavizándose en las nuevas generaciones. 3 de los 15 estudiantes aseguraban que Pedrito el Negro no era inapropiado, 11 dijeron entender por qué otros creían que era racista, mientras que un estudiante dijo sentirse personalmente insultado.
la defensa acérrima de Pedrito el Negro está suavizándose en las nuevas generaciones
Para que Sinterklaas siga siendo inclusiva, la celebración debe evolucionar y reflejar las sensibilidades cambiantes de su población. Cuando la juventud holandesa, étnica y religiosamente diversa, se haga adulta, es probable que la figura de Pedrito el Negro tome otro matiz. Un cambio así no significaría el fin de Sinterklaas. Como afirmó un estudiante, esta fiesta "es parte de Holanda y tiene que seguir siendo holandesa". Si Sinterklaas sigue incluyendo a los nuevos inmigrantes en la cultura neerlandesa, estos se asegurarán de que la celebración siga viva. "Sería bueno que los inmigrantes se uniesen a la tradición de Sinterklaas", dijo un joven musulmán, "porque puede unirnos aún más".
El autor del artículo es miembro del Programa Fulbright, y escribe sobre la migración y problemas fronterizos en el Instituto para la migración y estudios étnicos de la Universidad de Ámsterdam (IMES).
Imágenes de la Sinterklaas intocht (llegada), desfile de 2012 en Róterdam : cortesía de © FC
Translated from Sinterklaas and Black Pete's multicultural evolution in Netherlands