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Una flor en el culo

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Torre de BabelLifestyle

Arapientos o princesas: la suerte está al alcance de la mano. Si todos los bebés, una vez paridos, no tienen hadas que, inclinadas sobre la cuna, emitan deseos de cuentos encantados, otras supersticiones pueden de sobra colmar la magia cuando falta.

En Francia, por ejemplo, hubo un tiempo en que las jóvenes mamás rodeaban las mullidas camas de medallas de la Virgen María, que se suponía traerían buena suerte a los recién nacidos durante toda su vida. La expresión francesa avoir le cul bordé de médailles (literalmente “tener el culo rodeado de medallas”) hace gala de un espíritu popular y jocoso. Como a las buenas conciencias no les gustan las burlas de las figuras cristianas, otros espíritus aún más pícaros encontraron la expresión “tener el culo rodeado de fideos”.

Lejos del decoro que conviene a las buenas familias, tener suerte tiene a menudo que ver con el culo. Che culo !, dicen los italianos mirando al cielo. Che culo Della madonna, añaden con énfasis religioso, invocando una vez más a la virgen. Otros europeos más pragmáticos, prefieren pasarse a las plantas y adornar sus huertos para tener un golpe de suerte. Así, para los españoles, se dice que el suertudo “tiene una flor en el culo”.

Otros, además, tienen una metáfora muy animal: los rumanos, por ejemplo, dicen: a fi plin de noroc ca câinele de purici. Lo cual significa estar tan lleno de suerte como un perro de pulgas. En cuanto a los alemanes, rizan el rizo y vuelven naturalmente a la grasa, no a la celulitis, no, sino al tocino. Schwein gehabt, exclaman cuando alguien tiene, según ellos, “cerdo”. La expresión tiene su origen en los tiempos de la Edad Media. El gran perdedor de un torneo no se iba con el rabo entre las piernas, sino con un pequeño cerdo con tirabuzón como premio de consolación.

Por lo tanto, no hay necesidad de varita mágica para tener el culo rodeado… de anchoas, como dicen, al estilo local, los provenzales ¡Basta con cuidar de su delicado trasero!

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Translated from Bordé de nouilles