Telejato: Una televisión antimafia
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Maite de SolaEn Partinico, Sicilia, Pino Maniaci ha creado una especie de pequeña CNN familiar. Con el "telediario más largo del mundo", que alcanza a 150.000 espectadores, la pequeña emisora lucha contra la mafia
El político y crítico de arte Vittori Sgarbi escribía en Il Giornale, al día siguiente de las amenazas mafiosas contra el escritor Roberto Saviano: "la verdadera mafia es hacer, comportarse, no como víctimas de amenazas inexistentes (la mafia no amenaza, dispara y seguidamente niega hasta lo evidente), sino con absoluta normalidad. Viviendo y escribiendo y confiando en la fuerza del Estado". Una fuerza que durante décadas ha abandonado a los "periodistas de frontera" que han arriesgado, y muchas veces perdido, la vida por sus propias investigaciones. Un Estado que no rinde justicia ni tan siquiera tras la muerte: como en el caso del asesinato del periodista Mauro De Mauro, a quien mataron en 1970 por sus investigaciones sobre la mafia y del que, hasta ahora, no se conocen culpables.
Que la mafia se limita a disparar es una fantasía de tiempos pasado, porque busca sobre todo escapar del clamor mediático y de callar las voces molestas con intimidaciones. A la muerte de siete periodistas a manos de la mafia entre los años setenta y ochenta siguió el caso aislado del homicidio de Beppe Alfano en 1993. Y si Roberto Saviano decide finalmente expatriarse, la camorra habrá conseguido su objetivo sin disparar un solo tiro. Esto no significa que se deba bajar la guardia sino, más bien, que es justamente la atención de los medios de comunicación la que salva la piel de los periodistas incómodos. Las amenazas mafiosas son bien conocidas por Pino Maniaci, periodista y propietario de la televisión local siciliana Telejato, víctima de una agresión por parte del hijo, menor de edad, de un capo mafioso y del incendio intencionado de uno de los coches de la emisora.
La micro-televisión y el "capo de capos"
Telejato es una pequeña emisora local con sede en Partinico, Sicilia. Al principio propiedad del partido Refundación Comunista, el empresario (de poco éxito, según su propia confesión) Pino Maniaci la tomó al cargo en 1999, cuando estaba próxima a la quiebra.
Maniaci debió hacer frente a diversos problemas: las deudas heredadas de la gestión precedente, y las imposiciones causadas por su categorización como "televisión comunitaria", que incluyen desde las obligaciones de autoproducción al límite de tres minutos de publicidad por hora. Pero no se dejó desanimar, y con el tiempo fue dejando surgir la idea de hacer de Telejato una especie de CNN aficionada y en miniatura, que hiciera del periodismo de investigación y de denuncia su propia bandera. Nace así el "telediario más largo del mundo", dos horas de servicios de las 14.30 a las 16.30, seguido por casi toda la audiencia a la que alcanza, 150.000 personas en veinticinco municipios de la provincia de Palermo que reciben la señal de la televisión de Partinico.
Entre estas personas no faltan los mafiosos que, gracias a los relatos de la familia Maniaci (a Pino le ayudan, de hecho, sus hijos Letizia y Giovanni, además de algún colaborador desplegado en el territorio), se mantienen al día de las noticias sobre los clanes rivales. El capo Bernardo Provenzano, llamado "el capo de capos", arrestado en 2006 tras más de cuarenta años escondido, estaba entre los más asiduos espectadores del telediario de Telejato, que seguía desde su refugio secreto a pocos kilómetros de Corleone. Pino Maniaci, por teléfono, nos cuenta cómo le hacían llegar una solicitud cada año: "En enero le felicitábamos y le decíamos que no hiciera el idiota y se entregara".
"Estamos como en Irak: aquí se dispara"
Las amenazas mafiosas no son las únicas en querer poner un freno a la actividad periodística de Pino Maniaci. A intimidaciones y agresiones se añaden las querellas y denuncias de políticos y empresarios (por sí sola, la propietaria de la destilería Bertolino, una de las más grandes de Europa, ha interpuesto cerca de 200 causas, molesta por las investigaciones de Telejato sobre la contaminación causada por la fábrica). Todo esto, no precisamente por beneficios económicos, "conseguimos pagar los gastos de la televisión y coger algún bocadillo en el bar”, dice Maniaci, sino más bien porque "el periodismo, que debería ser el perro guardián del poder, ha quedado reducido a un chihuahua", y el único modo para restituirle su rol es el de hablar de temas candentes sin reticencias. Esto hace mucho más embarazosos el silencio y las omisiones de los titulares locales y nacionales, que hasta hace poco ofrecían una información incompleta (por ejemplo, sustituyendo por iniciales los nombres de los arrestados por mafiosos) y "hablaban del sexo de los ángeles", mientras que "hoy les hemos obligado a seguirnos, y también ellos hablan de mafia".
Como sucedió con Jean Leopol Dominique, periodista haitiano que militó por la libertad de su pueblo y cuya vida fue inmortalizada en el documental The Agronomist, de Jonathan Demme, así, en diciembre se estrenará el documental Telejato: la televisión más bella del mundo, del equipo italo-francés Mon Amour Film. Pino Maniaci no puede más que alegrarse, también porque "la exposición es la que te salva la vida; aquí estamos en la frontera. En el territorio de Partinico, en un año, ha habido siete asesinatos. Estamos como en Irak: se dispara".
Ilustración de Gianluca Costantini.
Translated from Telejato: una televisione antimafia