Refugees for Refugees : Músicos Sin Fronteras
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Marta AguadoLos festivaleros del Esperanzah! se han quedado cautivados con los ritmos envolventes de Refugees for Refugees, una banda de músicos refugiados provenientes de diferentes partes del mundo. Cafébabel ha tenido un encuentro con ellos que cuanto menos nos ha dejado marcados.
No es fácil vivir en Siria siendo músico: queman sus intrumentos y algunos incluso arriesgan su vida. Si tenéis la desgracia de cantar una canción de amor a la mujer de vuestros sueños en Afganistán, estáis amenazados de muerte. Los miembros de Refugees for Refugees nos hablan sobre su trayectoria como músicos refugiados.
Tristan Driessens (Bélgica) : « el proyecto de muziekpublique que surgió con un CD »
« Refugees for Refugees surgió hace unos 8 meses. La idea nació con la grabación de un disco : la asociación bruselense muziekpublique que tiene un sello discográfico invitó a un gran número de músicos-refugiados de todas partes. Después ese cd dio lugar a una gira, fue realmente muziekpublique quien impulsó el proyecto y me pidió que me encargase de la realización artística. Estudié en Turquía y estoy muy familiarizado con la música árabe y turca.
¿El futuro ? Hay mucha demanda, depende de sí tenemos la capacidad de cubrirla. También hay que lograr mobilizar a los músicos ya que algunos tienen otros trabajos. Todos se dedican a la música.»
Dolma Renqingi (Tíbet) : « Bélgica es como mi segundo país»
« Estoy en Bélgica desde 2006, me vine con mi marido tibetano. Mi marido vino primero y yo le seguí. Tuvo problemas políticos pero prefiero no dar detalles. Ahora todo está bien. Cuando llegué aquí era difícil cantar mientras que en el Tibet lo hacía todos los días, era mi trabajo. Tuve que aprender la lengua, me sentía sola. Ahora tengo dos niños, hace ya casi 10 años que estoy aquí. Es como mi segundo país. He vuelto a cantar, estoy muy contenta.»
Asad Qizilbash (Pakistán) : « Vivir en Europa es como vivir en una prisión dorada »
« Estoy aquí desde 2011. Llegué en avión. Ya estuve viniendo regularmente a Europa entre el 2000 y el 2009 para tocar. Luego tuve problemas políticos en Pakistán. Los terroristas la tienen tomada con los músicos. Mataron a un joven cantante de qawwali pakistaní muy conocido, Amjad Farid Sabri, solo por ser músico. Decidí venirme aquí porque tenía amigos. Hice mi demanda de asilo y mis amigos me ayudaron.
La vida como músico es muy difícil. Mi familia sigue en Pakistán, me gustaría traerles aquí. Hace 5 años que no les veo. El problema es que tengo que trabajar, encontrar un trabajo. Pero toda mi vida he tocado, no tengo experiencia en otros ámbitos, ¡pero si tengo que hacerlo, lo haré! Quiero trabajar, pero tendría que ganar al menos 1500€ y tener un contrato indefinido para que mi familia pueda venir. Para mí Europa es en cierto modo una prisión dorada : tengo de todo pero no puedo ver a mi familia, no puedo volver a Pakistán y ellos no pueden venirse aquí. Ya han pasado cinco años, mis hijos han crecido sin que yo les vea. »
Kelsang Hula (Tíbet) : «Miro al futuro con mucho optimismo »
« Llegué a Bélgica en 2009. Había problemas políticos en el Tíbet. Antes de llegar a Bélgica estuve en 1999 en Nepal y luego en India. Si me hubiese quedado en India no habría conseguido una visa. Bélgica es un buen país para los refugiados, llegué aquí con mi visa. Conocía ya a 25 tibetanos establecidos en Bélgica. En India nos dijeron que era un buen país. Hace 13 años que toco música, la mandolina. Miro al futuro con mucho optimismo. »
Mohamed Nabou Suhib (Siria) : « el Daesh quemó mi violín y mis partituras»
« Llegué hace dos años. Somos 4 sirios en el grupo. No conocía a ninguno de ellos antes. Somos de diferentes ciudades, de Alepo, Tabgha cerca de Al Raqa, la ciudadela del Daesh (risas). Decidí salir de mi país porque el Daesh me amenazó y la ciudad donde vivía estaba bajo su control. Quemaron uno de mis violines, mis partituras y libros de música.
A mediados del 2013, el Daesh tomó el contol de la ciudad. Como músico, éramos el día y la noche. El Islam del Daesh no es el nuestro, no tiene nada que ver con lo que nosotoros creemos. Todos tienen problemas personales con el Daesh. Yo tengo varios según ellos : soy kurdo, músico, fumador y mi mujer es enfermera. ¡Estas cuatro razones bastan para excluirme! (risas) »
M-Aman Yusufi (Afganistán) : huyó de su país por una canción de amor
« Llegué a Bélgica en 2007. Compuse y canté tres canciones a una mujer casada. El problema es que tanto su marido como su familia me escucharon cantar. Vinieron a buscarme al mercado. En Afganistán, primero tienes que respetar la religión y luego a la mujer. Su familia decidió matarme, conocían también a varios muyahidines. Me dispararon. Fue entonces cuando tomé la decisión de salir del país con la ayuda de un contrabandista que me dijo que me llevaría a Canadá. Llegué un sábado a la estación central de Bruselas donde tenía que esperarle hasta que me trajera una visa para ir a Canadá. No he vuelto a verle desde entonces (risas). Dormí dos días en la estación, sin pan ni bebida ni dinero. El lunes fui a la Comisaría General para Refugiados y Apátridas (CGRA) y me enviaron al centro de asilo donde viví tres años hasta que me mandaron a Anvers.
La música es mi hobby. Trabajé durante 25 años en la televisión nacional afgana como músico y cantante. Ahora estoy buscando trabajo.»
Translated from Refugees for Refugees : musiciens sans frontière