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Las iraníes, en la vanguardia de la revolución en Irán

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Raquel Sevilla

Una de las características importantes de la reciente revuelta popular en Irán ha sido el papel de las mujeres como fuerza motora de un movimiento de escala nacional que ha involucrado unas 140 ciudades y hecho tambalearse al régimen integrista. 

El sábado pasado, en París, se celebró una conferencia internacional bajo el título « Les Femmes, la forces du changement : soulèvement en Iran et le rôle des femmes » [Las mujeres, la fuerza del cambio: el levantamiento en Irán y el papel de la mujer, N. del T.], para movilizar los apoyos a la causa de las iraníes. Mujeres eminentes, principalmente personalidades políticas, legisladoras, juristas, madres de mártires y defensoras de los derechos humanos de 32 países de los cinco continentes, se desplazaron hasta París para apoyar a Maryam Radjavi, la dirigente del Consejo Nacional de la Resistencia Iraní. 

Rama Yade, ex-secretaria de Estado de Asuntos Exteriores francesa encargada Derechos Humanos. En su intervención declaró: «El mundo recordará que, lejos de ser una revuelta sin importancia, estas jornadas rojas en Teherán, Kermansha, Izeh, Toyserkan, Mashad, Tabriz, son el anuncio de una revolución. El mundo recordará que lejos de ser flor de un día, esta revolución es profunda. El mundo recordará que fue dirigida por mujeres, esposas, madres, hermanas. El mundo recordará que, conocidas o desconocidas, habrán sido punta de lanza, inspiración, guía, motor del despertar iraní. El mundo recordará que su sacrificado heroísmo habrá sido en vano».

«Sí, igual que ayer fuimos Charlie, hoy somos iraníes. Hoy, Irán tiene el rostro, la voz, de las mujeres, de los jóvenes, de las minorías. Irán tiene hoy el rostro de aquella mujer, nueva estatua de la libertad entre la neblina de los gases lacrimógenos, que se mantiene en pie ante los guardias revolucionarios gritando: "Abajo el dictador". Irán tiene hoy la voz de las mujeres que han dirigido a los manifestantes. Irán sigue teniendo el rostro de Maryam Radjavi, la primera de las resistentes apuntada desde el principio de los levantamientos como enemigo número uno.»

Aude de Thuin, fundadora de Women's Forum y presidenta de la iniciativa Women in Africa, tampoco faltó a la cita. En su intervención, subrayó el impacto de la acción de las mujeres de la resistencia en Irán: «Las mujeres que se revelan, que no dan su brazo a torcer, son cada vez más numerosas, aun conociendo los riesgos. Pienso especialmente en Sarah, Laleh, Nazdar, Sheyla, Tourane, Nastarane... Ellas se han atrevido a desafiar al poder. Ellas han puesto su vida en peligro. Y la prensa occidental no habla de ello.»

«La prensa se limita a decir que las mujeres se atreven a quitarse el velo, sin hablar de su papel real y de su participación en el levantamiento. Es como si para la prensa occidental quitarse el velo fuera el único derecho que reclaman. Las mujeres son un elemento indispensable del movimiento para un cambio profundo que concierne a la vez su vida y su país. Y nos contentamos con ver que se quitan el velo. Es hora de que el mundo sepa que las mujeres iraníes son un actor principal a favor de la libertad».

Por su parte, dirigiéndose a las mujeres de su país, la dirigente Maryam Radjavi declaró: «Rompiendo el clima de miedo, de represión y de incredulidad, devolved al pueblo la esperanza y el valor y fortaleced el poder de la juventud frente a la opresión. Para continuar la rebelión, las mujeres de todos los horizontes políticos y de todas las capas sociales deben crear focos de rebelión y consejos de resistencia en cada pueblo y ciudad».

«El levantamiento popular en Irán no sólo persigue el derrocamiento de un régimen político, sino que es sobre todo una revuelta contra el integrismo religioso. Un nuevo amanecer lleno de esperanza, no solo para el pueblo iraní, sino también para todos los pueblos de la región y del mundo».

Translated from Les Iraniennes en première ligne de la révolution en marche en Iran