Día mundial de la Fotografía
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El beso de Times Square de un marinero agradecido por volver a estar en casa, el hombre parado frente a los tanques en la plaza de Tiananmenn, bomberos deshechos de dolor el 11 de Septiembre, disparos en la Guerra Civil española o bombardeos que, al mirarlos, casi explotan en la cabeza del lector…
Todos estos momentos solo los puede recoger el arte de la fotografía y hoy, nuestra historia contemporánea, no se entendería sin ella. El pasado 19 de agosto, Día Mundial de la Fotografía, desde Cafebabel Sevilla, rendimos un sincero homenaje a este arte.
Testimonio y ocio
Como lenguaje, como archivador, como auxiliar de la memoria…una buena amiga me dijo una vez que para plasmar hechos en muchas ocasiones se debe pensar en imágenes y, si reflexiono sobre esto, es completamente cierto. Álbumes de papel, carpetas digitales, smartphones compitiendo por más megapíxeles y una auténtica obsesión por atrapar en el tiempo, lo que sucede en la actualidad.
La fotografía se ha domesticado y es aquí donde comercialmente existe el estímulo para la mejora de su tecnología. Cannon, Nikon, Pentax son cada vez mejores gracias a un usuario cuyo conocimiento aumenta exponencialmente sobre este oficio. ¿Quién no tiene en su haber carpetas de imágenes sobre papel de su infancia, adolescencia e, incluso, universidad y madurez? Su técnica es simple: jugar con colores y papel sensible, pero su efecto es espectacular: emoción, recuerdo, ilusión, nostalgia. El ser humano del siglo XXI y la fotografía son caras de una misma moneda.
Para los profesionales de la información que, poco a poco, nos vamos convirtiendo en hombres y mujeres orquesta, optimizar recursos es crucial. Redes sociales especializadas en fotografías, imágenes libres de autor o pequeños utensilios como trípodes minúsculos para captar la luz sin movimiento a altas horas de la noche son pequeños aliados que hacen la labor del periodista menos dura.
Este mes de agosto que está a punto de finalizar recuerda el proverbio popular “una imagen vale más que mil palabras” cuya semilla tuvo lugar el 19 de agosto de 1839 en París. La cámara oscura llevó a los equipos de película y estos a las más recientes cámaras digitales y sus sensores.
Un instante, un sonido, una mirada, un golpe de estado, un nacimiento…Solo la imagen puede plasmar sucesos y emociones capaces de provocar sinestesia gracias a su gran capacidad de transmisión.