Bienvenidos a Buriatia, la Rusia olvidada
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jef bonifacino
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cafébabel ESA tan solo unas semanas de las elecciones presidenciales rusas y de una probable reelección de Vladimir Putin, Jef Boniacio ha estudiado Buriatia y lo que ha cambiado en esta región abandonada durante los 13 años de mandato ejeridos por el partido Rusia Unida. Buriatria es una de las 53 repúblicas autónomas de la Federación de Rusia y hace frontera con China y Mongolia. Irkoutsk y Oulan-Oude, ciudad cruce de Rusia y el mundo asiático, se pueden considerar como las capitales de la Rusia asiática. Sin embargo, el 80% del presupuesto de Rusia se asigna a Moscú y San Petersburgo, dejando entonces el 20% para el resto del país. A pie, en tren, en autobús, haciendo autostop, Jef ha viajado numerosas veces por Siberia y Rusia. Tres mil kilómetros recorridos para descubrir las condiciones de vida, la cultura y la religión (chamanismo en el noroeste, budismo en el sureste) de los rusos buriatas que saben que, sea cual sea el resultado del escrutinio, solo podrán contar con ellos mismos.
Todas las fotos: © Jef Bonifacino
Joven mamá buriatia y su bebé en el Transiberiano. Origen: Moscú. Pasaron cinco días en tercera clase y sin duchas para llegar a Irkoutsk, en las orillas del río Baïkal.
Foto : © Jef Bonifacino
Una de las líneas de tranvía de Irkoutsk. Aquí, no decimos "carrretera", sino "dirección". El desvío de fondos, de por sí insuficientes, para el revestimiento de las carreteras explica su estado.
Foto : © Jef Bonifacino
Volodia y su potro, nacido en el viejo hipódromo de Irkoutsk que hace cinco años que se dejó de mantener.
Foto : © Jef Bonifacino
La vida es dura, las perspectivas de trabajo escasas, pero el alcohol y los cigarrillos son remedios accesibles a todos frente a las dificultades.
Foto : © Jef Bonifacino
El actor más joven de la tropa, Amarsen, que representa ahora la epopeya de Geyser, el héroe mítico buriata, símbolo de una identidad recobrada. Novo Lenino, en los alrededores de Irkoutsk.
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La plaza principal de Oulan-Oude, siempre en obras.
Foto : © Jef Bonifacino
Svetlana y Anatoli Baskakov, director del teatro ruso Oulan-Oude. Carente de subvenciones públicas, él y sus actores lo han construido con sus propias manos.
Foto : © Jef Bonifacino
Sayana, bailarín contemporáneo. El baile y los vestidos son de inspiración buriata, pero sabe despegarse de esto para inventar nuevas formas e intentar llegar a un público más internacional. Aginsk cerca de Oulan-Oude.
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Jóvenes en un club en Tchita; uno de los pocos lugares en los que se puede salir y divertirse, incluso si la iluminación es a base de bombillas desnudas.
Photo : © Jef Bonifacino
Veterano de la armada roja en el concierto por el aniversario de los 180 años de Datsan (monasterio budista) de Guneï, destruido por la armada soviética en los años 1940. Sin embargo, pese a las dificultades de la vida, muchos buriatas siguen teniendo nostalgia de la época soviética.
Foto : © Jef Bonifacino
Carrera de jinetes en la estepa. La equitación es uno de los tres deportes tradicionales buriatas juntocon la lucha y el tiro al arco. El caballo es símbolo de humildad y sigue siendo la mayor riqueza de los buriatas. El vencedor se llevará uno o dos terneros.
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Igor es pintor. A veces expone en los halls de los bancos, pero continua viviendo en una pequeña datcha a las afueras de Irkoutsk porque es imposible que alguien pueda vivir de su arte en Buriatia.
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Liouba y su padre Igor en Irkoutsk. El agua está fuera de la casa, Liouba es muda, pero es muy caro diagnosticar su enfermedad.
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Convertido en deporte nacional, esta disciplina ha escapado del comunismo erradicando los trajes locales. Ahora se practica también de manera tradicional, sómbolo de conexión entre la tierra y el cielo.
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Alkhanaï. Hay tantas maneras de llevar la toga budista como variantes del budismo (tibetano, mongol, buriata…) En Siberia, el budismo se ha convertido en la segunda religión oficial. En el fonso, el perro guardián de un zoo minúsculo que alberga dos zorros negros y un oso y que no visita nadie.
Foto: © Jef Bonifacino
Abuela en Ust-Ordynski, cerca de Irkoutsk. El huerto y el ordeño de la vaca son sus únicos medios de subsistencia.
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Foto : © Jef Bonifacino
El chamán Valentin en Bougouldeïka. El traje buriata del águila y el rosario budista atestiguan el sincretismo que se ha producido a lo largo de los siglos entre las dos filosofías. Valentín trabaja mucho: además de su trajo de chamán, inicia a los turistas en el chamanismo en la isla de Olkon, en medio del lago Baïkal.
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Sacha lleva su gorra de policía y un colgante budista. Sus padres dejaron la tradicional yurta antes de que naciera. Hoy, apenas llega a ganarse la vida como policía en los trenes y vive en Irkoutsk.
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Segundo paso...
Foto : © Jef Bonifacino
La abuela Evenks con u nieta en Malo Goloustnoïé, cerca de Irkoutsk. En 1938, cuando se produjeron las represiones soviéticas contra los chamanes, muchos Evenks fueron a refugiarse al sur.
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Ceremonia de edificación de un Datsan en Archan. Al sur del lago Baïkal, el budismo esdtá presente desde el siglo XIV. El comunismo lo prohibirá, al igual que el chamanismo, en 1930 y después será reautorizado el final de éste. Hoy, el budismo es cada vez más practicada en una soicedad donde el individualismo tiende ser, como en todas partes del mundo, norma social.
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Sacha, cómico en el teatro ruso más oriental en à Oulan-Oude. Profesional, sabe sin embargo que no puede vivir con una paga mínima y acumula, igual que los otros actores, pequeños trabajos.
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Vendedora en el gran mercado de Irkoutsk. Nada ha cambiado desde hace 20 años.
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En la isla de Olkhon, en el lago Baïkal. La escuela cerró en 1984, como muchas otras instituciones. La isla vive casi en la autarquía. Pero podemos cruzarnos con caballos que han regresado al estado salvaje?
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Translated from Bienvenue en Bouriatie, la Russie oubliée