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Apps para la Felicidad: La solución al malestar millennial?

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Karin Zapata

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Todos los que me conocen saben que soy muy cínica. Pero recientes acontecimientos en mi vida personal han puesto una fuerte tensión en mi bienestar general, así que quería aprender a recuperar el control cuando las cosas me abrumaban. Como cualquier otro millennial, me pregunté: ¿puede ayudarme mi smartphone? 

Todo dio inicio el año pasado, en una fría mañana de febrero. Fui a visitar a una amiga en los Países Bajos en su última noche en la ciudad y al día siguiente me encontré sola en su antigua cocina. Mientras ella ya estaba en un vuelo de regreso a Italia, yo compartía una taza de té con su compañero de habitación. La incomodidad eran tan espesa cono la niebla afuera, eventualmente le pregunté a Pascal qué hacía en su vida. Me dijo que estaba estudiando psicología cognitiva, pero aún más importante, que estaba desarrollando un ambicioso proyecto. Es una idea con la que ha estado trabajando por más de dos años: convertir el auto-mejoramiento en un videojuego. Su proyecto me interesó pero tenía que marcharme, por lo que puse esta encantadora conversación en mi cajón de personas-geniales-que-conocí-una-vez y ya no pensé mucho sobre eso... Hasta ahora. 

Avancé rápido un año y ahora estoy en un punto bastante difícil. Eventos recientes en mi vida, me han dado un sabor a ‘no tienes todo resuelto después de todo’, y me di cuenta de que tenía que cambiar algunas cosas. Por pura casualidad, el nombre Pascal apareció otra vez en una conversación cualquiera con mi vieja amiga, y decidí escribirle para obtener algunos consejos. 

De su parte, Pascal no solamente habla, sino que ha emprendido una caminata sorprendente, aunque aparentemente ardua.  Me cuenta cómo acaba de lanzar el primer prototipo de su videojuego para ejemplificar mejor de lo que se trata su proyecto.  También sugirió otras dos aplicaciones que están haciendo algo similar, y mis antenas millenial comienzan a sonar. 

Como la mayoría de personas que conozco, estoy luchando por encontrar la felicidad y plenitud en mi vida adulta. Probablemente mi teléfono es la herramienta más ecencial que me ayuda a navegar por este laberinto de responsabilidades, citas, preguntas de ‘cómo puedo’ y mucho más. Entonces ¿podría también convertirme en una mejor persona y ser más feliz? Estaba demasiado curiosa como para no probarlo. Pascal sugirió que probara Happify y The Fabulous, dos aplicaciones sobre felicidad muy conocidas. Empecé un viaje de un mes, revisando todos los días y haciendo cualquier tarea que me dieran estas aplicaciones, registrando todo el proceso.

Mi teléfono me recuerda que me desprenda de mi teléfono

Existen miles de aplicaciones diferentes que abordan la superación personal de muchas maneras: meditación, contador de calorías, seguimiento del sueño y mucho más. Sin embargo las estadísticas son difíciles de encontrar, la autoayuda móvil parece haberse convertido en una gran tendencia en todo el mundo. El fenómeno ‘mindfulness’ ha tenido un éxito particular, con aplicaciones que hacen que la meditación sea fácil y accesible. Alguna de las aplicaciones más famosas, como Headspace, fue descargada más de 11 millones de veces en 2017.

Según Ib Ravn, coordinador del Máster en Psicología Positiva en la Universidad de Aarhus, nuestra generación es más propensa a la ansiedad, cuando se trata de cuestiones relacionadas a la adultez: El ritmo de vida es más rápido y las oportunidades disponibles para los jóvenes han incrementado. Puede parecer libertad, pero aveces esta libertad se convierte en auto recriminación, culpa y presión para tomar la decisión correcta. Sin duda me identifico con esto. Navegar a través de un mundo lleno de oportunidades, y sin embargo, carente de dirección, me ha proporcionado una gran cantidad de estrés.

Empecé con The Fabulous. The Fabulous se lanzó en 2013 con la idea de que, a través de la construcción de buenos hábitos, podemos ser más productivos. Es una aplicación colorida, bien diseñada y muy fácil de usar. El proceso de construcción de hábitos empieza simple: al inicio, se te pide beber un vaso de agua a primera hora de la mañana por tres días consecutivos, después comer un desayuno nutritivo por otros tres días (mantiniendo tu primer desafío), luego hacer ejercicio por 10 a 15 minutos. Después de 19 días, se supone que deberías tener un ritual de mañana, tarde y noche que abarque todo, desde meditación hasta trabajo productivo y alimentación saludable.

Pero desde el primer momento, algo me molestó: ¿Realmente iba a ser más productiva usando mi smartphone? Si tuviera que hacer una lista de las cosas que me ponen ansiosa acerca de la vida, mi smartphone probablemente ocuparía el primer puesto de la lista. You Puedes vivir con él, pero no puedes vivir sin él. La idea de todas las horas que he desperdiciado distrayendome mientras estudio, o comparando mi actividad en las redes sociales con algunos de los más mágicos de mis amigos expertos en tecnología, hace que se me pongan los pelos de punta.

Kevin Chu, publicista digital de The Fabulous, tuvo algunas palabras alentadoras para mi: “Muchas de las gigantes empresas emergenes quieren que mantengas tus ojos pegados al teléfono. Pero si te das cuenta, cuanto [The Fabulous] te pide hacer algo, te pedimos que dejes el teléfono.” Me explicó que, además de dar pasos pequeños, está la noción de cambiar tu entorno: “Estos hábitos no interrumpen tu rutina actual.” Se trata de una cuestión de integración.

Debo decir que, en general, disfruté con la aplicación. Si hay algo que necesito más en mi vida para dominar el arte de la adultez, es estructura. The Fabulous me brindó eso.  Hace algunas semans me desperté después de una noche difícil. No fue la pero resaca de todos los tiempos, pero mi cabeza me dolía y me sentía exhausta, nauseabunda y estaba de muy mal humor.  Mientras los cosas de mi lista de tareas crecian a cada segundo, estaba lista para darme un descanso y quedarme en cama todo el día. Agarré mi telégono y comencé a desplegarme por algunas historias de Instagram.

Las notificaciones de The Fabulous aparecieron, recordándome de beber agua, hacer ejercicio por 10 minutos y comer un desayuno saludable. Ugh. Estaba en una encrucijada: I was at a crossroad: ¿holgazanear o no  holgazanear? ¿Caminar en el parque o quedarme en cama donde estoy abrigada y protegida de la dureza del mundo exterior? Decidí salir, caminar, comer un desayuno saludable e incluso – para mi propia sorpresa – puede trabajar toda la tarde. Si eso no es madurez, no sé qué es. 

Aún así, algunas cosas simplemente no funcianan en cuanto a mi estilo de vida.  Hubo una falta de opciones vegetarianas en las recetas diarias sugeridas por The Fabulous. Debía llamar a mis padres todos los días. Sabes quete estás esforzando mucho cunado los fantasmas de tu madre te persiguen y tienes que apilar kilos de tofu para reemplazar todo el pollo asado que supuestamente deberías consumir. Kevin dijo que el equipo está trabajando en personalizar la plataforma aún más, y admite que: “No hay una ‘talla única’ para la construcción de hábitos.” You don’t say.

Una felicidad para llevar, por favor!

Después está Happify. Al principio, la aplicación te pide que evalues tu nivel de felicidad mediante una serie de preguntas referidas a tu vida social, salud y la forma en que expresas tus emociones.  Después, la aplicación propone una posta. Yo elegí “conquer negative thoughts”. Lo que viene después es una serie de tareas que eventualmente te permitirán desarrollar cinco habilidades escenciales: disfrutar, agradecer, aspirar, dar y empatizar – lo que Happify llama “S.T.A.G.E.”. Estaba lista para entrenarme en ser más feliz.

A medida que pasaron las semanas, intuitivamente entendí cómo algunas de las tareas propuestas podrian ‘alegrarme’, como pedirme que enviara un cumplido a alguien importante, o preguntarme: “¿Si pudieras experimentar cualquier emoción ¿cuál sería?” Luego la aplicuación me desafiaría a ponerme en esa mentalidad. Esa fue la revelación: un momento, ¿Puedo sentir lo que deseo sentir? Casi es como si de alguna forma tuviera el control de mis emociones! Sin embargo, algunos de los juegos parecían un poco artificiosos y aunque el sitio web de Happify cuenta con una sorprendente lista de colaboradores y de estudios científicos detrás de sus afirmaciones, no estaba segura de cuán efectivos eran estos juegos.

La voz del professor Ravn estaba pegada a mi mente. Realmente el no apaciguó mis dudas cuando se trataba de los juegos deHappify: “Bueno, si mejoro en ese pequeño aspecto conceptual en lugar de aquel pequeño aspecto conceptual, mejorará de esa forma mi vida en general?” Justo lo que pensaba.

Se me hizo claro que no me habían vendido la app, literalmente. Varias funciones son exclusivas para la versión premium, que oscila entre 2.6 y 13 USD por mes dependiendo de la duración de tu plan de subscripción. Aunque aprecio que me ayudó a ser más crítica y a poner distancia en cuanto a mis pensamientos negarivos y yo, es un poco demasiado. Rapidamente me di cuenta de que estas aplicaciones podrían tener dificultades para mantener a sus usuarios involucrados por un periodo de tiempo más largo. Es como cuando un niño compra un brillante juguete nuevo y se aburre después de haberlo usado por tres días. Estas aplicaciones son tan faciles para acceder como para aburrirse. Entonces, ¿cómo mantenerme motivada a largo plazo?

Grow Playground and happy gaming

Pascal tuvo la respuesta. Desde nuestra primera conversación, había empezado un Máster en el Centre des Recherches Interdiciplinaires en París, donde junto a un grupo de seis personas, está finalmente desarrollando su idea en un videojuego llamado Grow Playground. Como antiguo jugador promesional de World of Warcraft y League of Legends, Pascal sabe exactamente lo motivadores que pueden ser estos juegos.

Inspirado por proyectos similares y elementos de psicología cognitiva y positiva, Grow Playground combina un entramado de juegos de personificaión con viajes de conocimiento y construcción de hábitos. “Después de que terminé de jugar World of Warcraft, estaba como: ‘Ok ¿acabo de desperdiciar los últimos cinco años de mi vida, o aprendí algo útil con esto?’ Me pregunté si sería posible crear algo que las personas pudieran aplicar directamente a sus vidas,” Explica Pascal.

Con Grow Playground, Pascal espera que las personas que juegan videojuegos hagan más conexiones en su pueblo o ciudad con algún propósito. A principio de este año el equipo lanzó un prototipo muy básico, pero el objetivo es desarollar una versión del juego que pueda ser optimizada por los usuarios en un código abierto al estilo Wikipedia.

No soy una jugadora y no necesariamente me sumo a lo que Pascal llama “value system”, que es inherente a la mayoría de los videojuegos y te impulsa a que seas mejor en algo.  De cualquier forma, lo probaré justo como hice con Happify y The Fabulous. Sin embargo, una cosa está clara: Grow Playground tiene el potencial de llegar a personas que de otra forma nunca pensarían en mejorarse a sí mismas. Después de todo, fue la motiación del mismo Pascal – en la cocina del apartamento de mi amiga – que me inspiró a  ‘happify’ a mi misma.

“¿Qué hay de la melancolía?”

Siempre supe que sabía dos cosas en la vida: primero, que la felicidad no se me da facilmente, y sengundo, que la mayoría de las herramientas para la auto ayuda no tenían nada que enseñarme. El profesor Ravn compaginó mis dos creencias. Él desacredita el mito que la psicología cognitiva se enfoca solamente en la noción de “sonriele al mundo y el mundo te sonreirá”, pero también cuestiona a las personas que viven en la negatividad. “¿Qué hay de la melancolía, solamente debemos desterrarla? Realmente no se que decir, más que: estas seguro de que quieres estar con ese estado de ánimo o solamente tienes que aceptarte por estar así?”

Así que tal vez he sido demasiado perezosa. Tal vez la felicidad, productividad y la sensación de estar al tanto de cada situación, como la mayoría de cosas, requiere trabajo duro. Tal vez debería esforzarme más para cambiar mi forma de pensar y ver las cosas de una forma mas saludable, positiva y completa.  Pienso que la respuesta para mi, radíca en combinar las herramientas que la tecnología ofrece con algunos buenos y viejos consejos para motivar a personas que encuentro en mi vida no digital. 

Por ejemplo, el profesor Ravn tiene una opinión diferente sobre cómo encontrar gratificación: “Creo que mucho de psicología positiva es solamente una manera de ayudar a las personas a mejorar sus propias vidas. Encontrar un significado que trascienda tu ego y vaya más alla de tus necesidades particulares, te ayudará a sentirte pleno, de una manera que es bastante diferente a estas mágicas técnicas egocéntricas que estan bastante prevalentes en la psicología positiva.”

Pero sí, la tecnología no es el cuco y mi smartphone es - y será - muy útil para esta etapa de mi vida. De hecho, probablemente seguiré usando The Fabulous para calmar el dolor de la adultez – aunque tal vez menos diligentemente. Siendo alguien caótico por naturaleza y que se alimenta de la arbitrariedad, es un gran salto seguir mis hábitos diariamente. Sin embargo, admito que: incorporar estructura a mi vida me hizo más eficiente, y definitivamente me ayudó en mis días de resaca. 

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Translated from Happiness apps: The solution to my millennial malaise? by Karin Zapata.